1:02 a.m. y está lloviendo, el sonido del agua contra el suelo acaricia mis oídos. Paz. Pero la lluvia a estas horas me recuerda a ti, me recuerda a lo que me contaban sobre ti, a tus noches mirando el cielo, a la luna, a la lluvia, esa que ahora yo también contemplo, sin ti. Me duele y lo siento, cada vez te siento más lejos.
Cada nuevo amanecer guarda una nueva oportunidad, una nueva vida de 24 horas de duración perseguida por el anochecer. Vas a contrareloj y sin aliento. Ahora imagina que es la última vez que ves salir el sol, que cada segundo se te escapa sin tan si quiera poder verlo...bienvenido a mi día a día.